Consideraciones legales para la redacción de pagarés: mejores prácticas para los acreedores

Los pagarés son fundamentales para los acreedores, ya sea que otorguen préstamos directos u ofrezcan bienes en condiciones de cuenta abierta (crédito comercial). Los acreedores buscan asegurar sus deudas, asegurándose de tener métodos confiables para cobrar en caso de que el deudor no cumpla con sus obligaciones. En México y la mayoría de los países latinoamericanos, los pagarés son una herramienta legal eficaz que ofrece a los acreedores una ruta más directa para el cobro de deudas. Este artículo explora los aspectos clave de los pagarés en México, incluido su marco legal, los requisitos de redacción y los procesos de ejecución.

¿Qué son los pagarés?

Un pagaré es un documento que contiene una promesa incondicional de pagar una suma fija de dinero a una persona específica o al portador del pagaré, ya sea en una fecha específica o cuando se lo solicite. Si bien no es estrictamente un dispositivo de seguridad, un pagaré agrega una capa de seguridad para los acreedores. Les permite iniciar un procedimiento ejecutivo en el tribunal, lo que ofrece ciertas ventajas:

• Embargo de activos: los acreedores pueden embargar inmediatamente los activos del deudor sin depositar una fianza. 
• Asunción de deuda: se presume legalmente que el deudor es el deudor, lo que traslada la mayor parte de la carga de la prueba al deudor.

¿Cómo funcionan los pagarés?

Los pagarés pueden salvar la brecha entre un pagaré informal y un contrato de préstamo formal. Mientras que un pagaré reconoce una deuda, un pagaré implica una promesa formal de pagar a pedido o en una fecha futura específica. El pagaré también puede incluir detalles como el cronograma de pago y las tasas de interés. Estos pagarés son versátiles y permiten que tanto las personas como las empresas otorguen crédito sin pasar por instituciones financieras.

Generalmente hay dos partes involucradas:

• El emisor (promitente): la persona o empresa que emite el pagaré y promete pagar.
• El beneficiario (promitente): la persona o empresa que proporciona el préstamo o crédito.

Tipos comunes de pagarés

1. Pagarés de préstamos estudiantiles

Los pagarés suelen ser firmados por los estudiantes cuando solicitan préstamos. En algunos casos, los préstamos federales para estudiantes permiten a los estudiantes firmar un pagaré maestro, que cubre varios préstamos a lo largo de varios años. Los términos del préstamo, incluidas las tasas de interés y los cronogramas de pago, se describen en el pagaré.

2. Pagarés hipotecarios

Los propietarios firman pagarés cuando solicitan hipotecas. El pagaré hipotecario describe el monto principal, la tasa de interés y las condiciones de pago. El pagaré también detalla las consecuencias de no realizar los pagos. Es importante destacar que, si bien la hipoteca en sí puede registrarse en registros públicos, el pagaré queda en poder del prestamista y solo se devuelve cuando la deuda se paga en su totalidad.

3. Pagarés de crédito corporativo

Las empresas utilizan con frecuencia pagarés para financiamiento a corto plazo. Una empresa que necesita efectivo puede emitir un pagaré a sus acreedores, prometiendo el pago después de cobrar sus cuentas por cobrar. Estos pagarés suelen ser más flexibles que los préstamos o bonos corporativos, aunque pueden implicar un mayor riesgo y tasas de interés. En los EE. UU., los pagarés corporativos deben registrarse en la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) o en las autoridades estatales pertinentes.

Pagarés Internacionales

Cuando se trata de pagarés internacionales que se ejecutan en México, entran en juego varios factores. El Código Civil Federal mexicano y la Ley General de Papel Comercial y Operaciones de Crédito (LCPCT) regulan estos pagarés. Los artículos 252 a 258 de la LCPCT establecen reglas específicas para los pagarés extranjeros, entre ellas:

• Capacidad jurídica: el artículo 252 establece que la capacidad jurídica de la persona que emite el pagaré debe ajustarse a las leyes del país donde se emitió el pagaré.
• Ley aplicable: el artículo 254 señala que si el pagaré no especifica una ley aplicable, se aplicará la ley del país donde se emitió.

Sin embargo, hacer cumplir un pagaré extranjero en México puede ser complicado y costoso, ya que las leyes extranjeras deberán presentarse ante los tribunales mexicanos. Por lo tanto, cuando se trata de pagarés destinados a ser ejecutados en México, es recomendable redactarlos de conformidad con la ley mexicana.

Requisitos para pagarés válidos

Si un acreedor pretende emprender acciones legales en México, los pagarés deben cumplir con requisitos legales específicos, como se indica en el artículo 170 de la LCPCT:

• Título del documento: La palabra “pagaré” debe estar explícitamente indicada en el documento.
• Promesa incondicional de pago: El documento debe contener una promesa incondicional de pagar una cantidad específica.
• Beneficiario: El pagaré debe nombrar a la persona o empresa a quien se le realizará el pago.
• Condiciones de pago: La hora y el lugar de pago deben estar claramente indicados. Si bien no son esenciales, estos detalles pueden determinar la jurisdicción en caso de disputas legales.
• Lugar y hora de emisión: Debe incluirse el lugar y la hora en que se emitió el pagaré.
• Firma: La firma de la persona o entidad que emite el pagaré es crucial para su validez. Una fotocopia o una firma enviada por fax no se sostendrán en un tribunal; se requiere la firma original.

Redactar pagarés

Redactar pagarés en México puede ser sencillo siempre que incluya los elementos esenciales que exige la ley. Sin embargo, se pueden agregar cláusulas adicionales para adaptar el pagaré a necesidades específicas, como:

• Tasas de interés: puede incluir una tasa de interés fija.
• Cargos por pago atrasado: se pueden agregar disposiciones sobre cargos en caso de pago atrasado.
• Calendario de pago: se puede delinear un plan de pago específico.

También es importante asegurarse de que el nombre completo del deudor esté incluido en la parte inferior del pagaré, junto con la dirección y, si corresponde, el nombre de la persona que firma en nombre de una empresa.

Consideraciones finales

Antes de ejecutar un pagaré en México, considere las siguientes recomendaciones:

• Ejecución bajo la ley mexicana: si se espera que el pagaré se ejecute en México, es muy recomendable redactar y firmar el pagaré bajo la ley mexicana para evitar complicaciones.
• Asesoría legal: asegúrese de que se cumplan todos los requisitos legales y técnicos, y consulte con profesionales legales familiarizados con las regulaciones mexicanas sobre pagarés.
• Personalización: si bien se pueden utilizar plantillas estándar, cada pagaré debe adaptarse a la transacción específica para evitar ambigüedades o desafíos legales.

Conclusión

Los pagarés son una herramienta esencial para asegurar las deudas y asegurar el pago oportuno, especialmente en transacciones transfronterizas que involucran a México. Al seguir los requisitos específicos de la ley mexicana, los acreedores pueden asegurarse de que sus pagarés sean ejecutables y de que puedan iniciar procedimientos ejecutivos para el cobro de deudas si es necesario. Si bien la redacción de estos pagarés puede parecer simple, es vital prestar atención a los detalles y realizar una consulta legal para evitar problemas costosos de ejecución más adelante.

Lea también: Descuento de Letras Respaldado por Carta de Crédito en Exportaciones